En estos días también he estado pensando en lugares a los cuales me gustaría regresar. Y me vino a la mente el pequeño pueblito de donde salió mi abuelo de España. Felanitx y sobre todo el puerto de veraneo de Porto Colom. Tuve la ocasión de visitarlo hace 17 años. Y sólo estuve de pasada en el carro de mi primo. Pero esta vez me gustaría parar allí. Y sentarme y ver los barcos de los pescadores. Y disfrutar del silencio de la bahía. Simplemente escuchar ese sonido que hace el mar allí. Un mar sin grandes olas. Un mar tranquilo. Como quisiera estar yo. Luego de sentarme allí, tomarme un café y ver gente pasar.
En realidad no sé si eso suceda. Pero sólo el pensar en la aldeíta de Porto Colom me hace sentir mejor. Y mirar esta foto que encontré en Flickr aún más.
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