ansiedad

En estos días tengo que ponerle un nombre a mis pensamientos que me causan ansiedad. Preferiblemente un nombre que los haga lucir pequeños y ridículos. Porque así es como debo verlos. Como lo pequeño que son. Porque lo que yo hago es ponerlos grandes, tan grandes que pienso que pueden causar catástrofes.

Pero en realidad no lo son. Son pequeños y más aún son remotos. Son pensamientos de cosas que no tienen ninguna base en la realidad. O muy poca base en ella.

El otro día leí un libro en el que decía que al verte en el medio de pensamientos de ansiedad, te eches hacia atrás y te imagines que en ese momento eres un personaje de una película. ¿Qué pensarías de ese personaje? Lo más probable es que te reirías de él y comentarías de lo ridículo de su manera de pensar. Algo como Woody Allen en "Hannah and Her Sisters' cuando se obsesionó con la idea que tenía un tumor en el cerebro. Y mientras más leía sobre el asunto, más pensaba que sufría todos los síntomas. Me acuerdo que me reí de se personaje y todo el mundo en el cine lo hacía también.

Y aquí estoy yo hoy actuando de la misma manera. Debo reirme. Eso es.
Soy Woody Allen. Soy el "comedy relief".