Hace un año que perdí mi trabajo. Y pensé que sería una buena idea hacer un resumen de cómo me siento un año más tarde. Pero en lugar de escribir una letanía he decidido dividir mis pensamientos en varios entries cortos.
El primero tiene que ver con mi vida luego de irme freelance.
Bueno, para empezar, no he tenido más ataques de pánico y episodios de ansiedad. Las pastillas de Xanax están ahí en su potecito acumulando polvo.
Lo que me hace pensar que la mayoría de mis ansiedades no tenían que ver tanto con la crisis de edad media, sino con el trabajo.
Con el tener que probarle a la gente cada día que era todavía relevante en la industria. Con el tener que convencerme que la creatividad publicitaria todavía llenaba alguna parte de mi "ser creativo". Eso era lo que daba estrés. Eso era lo que me ponía triste.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment